El exsenador Adriano Sánchez Roa dijo este domingo que el reciente decreto emitido por el presidente Luis Abinader para favorecer a los productores de arroz es una “chapucería” que pretende evadir obligaciones constitucionales entre naciones. 4n4b3
El secretario de Asuntos Jurídicos del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), afirmó que la medida no tiene categoría para modificar el Tratado de Libre Comercio del DR-Cafta, firmado por Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana,y que el país se expone a “serias” demandas ante la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Sánchez Roa, quien fue del Banco Agrícola, consideró que “si no existiese ese tratado comercial lo dispuesto por el gobernante podría funcionar como una protección del país a sus productores, sin embargo, en el contexto actual es una chapucería que pretender evadir obligaciones constitucionales entre naciones”.
Sánchez Roa afirmó que, paralelamente a ese decreto, el Gobierno de los Estados Unidos aprobó la extensión de su ley agrícola Farm Bill, que contiene un elevado subsidio al arroz, asegurando la elevada ventaja en productividad y disminución de sus costos de producción.
A su juicio, Estados Unidos podrá colocar su arroz en el país con 6 pesos más baratos que el que se cosecha en República Dominicana, además de expresar su preocupación” porque Washington sigue recuperando su producción arrocera, que este año 2024 se estima en 167.7 millones de quintales.
Manifestó que el violar el acuerdo del DR-Cafta, puede llevar a “retaliaciones fuertes” de los Estados Unidos u otras naciones firmantes del acuerdo, “pues mantenemos exportaciones importantes con ellos, como tabaco, café, cacao, mango, aguacate, bananos, hortalizas, zona franca, equipos médicos, azúcar y otros productos.
Sánchez Roa se lamentó de que las autoridades agropecuarias perdieran el tiempo dando esperanzas, para salir finalmente con una “solución” que busca reducir la incertidumbre, pero agrava la situación.
Dijo que el arroz merece un trato preferencial, puesto que es el “alma” de la producción nacional, con 30,000 productores arroceros en 21 provincias y cerca de cien municipios del país, más de 300,000 empleos directos e indirectos, y es el alimento principal en el paladar del dominicano.
